Evangélicos – Carta al Director

por | 2 diciembre, 2015

¿Son los evangélicos discriminados en nuestro país? Respondimos lo siguiente a la Carta al Director enviada por múltiples líderes evangélicos y publicada por el diario La Segunda bajo el título “Evangélicos”, en su edición del 14 de noviembre de 2015. Desafortunadamente, no fue publicada.

Sr. Director:

El ex-capellán de la Moneda, Sr. Alfred Cooper, junto a otros pastores, en su carta del 14/11 plantean una serie de interrogantes que piden respuesta:

Primero, no, los evangélicos no están siendo discriminados al recibir poca cobertura mediática durante sus marchas, pues no es obligación de los medios el cubrirlas. Al contrario, aparte de obligar al resto a escuchar sus regulares prédicas públicas, son ellos mismos quienes hoy promueven activamente la discriminación a homosexuales y librepensadores, así como antaño lo hacían contra judíos, esclavos, negros, zurdos y mujeres con intención de votar. Discriminación es que las iglesias no paguen impuestos mientras sí lo hacemos todos los demás; peor aún cuando aprovechan ese beneficio para promocionar ideologías que incitan al odio.

Segundo, la «agenda valórica» no está haciéndose sólo entre quienes piensan igual, sino que a través de un parlamento representativo democráticamente electo, con mayorías y, aparte, con amplia concordancia en la población sobre estos temas.

Tercero, no sólo se escucha a quienes promueven las políticas públicas de salud respecto del aborto y uniones civiles entre quienes se amen, sino que también a quienes promueven la empatía con las minorías discriminadas y ofrezcan argumentos racionales basados en evidencias, como corresponde en un debate democrático. Enhorabuena, han ido quedando gradualmente fuera los prejuicios basados en la superstición religiosa personal, más aún los de aquellas que sobrevaloran la fe ciega en desmedro de la responsabilidad individual respecto de las consecuencias que tengan nuestras obras para el prójimo.

Finalmente, si es por popularidad, los aconfesionales casi equiparamos a los evangélicos y no gozamos del privilegio de un feriado propio. No obstante, bien podemos aprovechar aquellos de los que sí gozan las religiones, pero para promover el pensamiendo crítico, el humanismo secular y la no discriminación, en contraste con el provecho que algunas de ellas obtienen a través del diezmo a carcelarios y adictos a cambio de enseñarles a orar en favor de la discriminación.

Atte.,


Luis León Cárdenas Graide
Presidente
Asociación Escéptica de Chile (AECH)
www.aech.cl

La carta inicialmente publicada fue:

Evangélicos

Señor Director:

El pasado 31 de octubre se celebró el Día de las Iglesias Evangélicas. Esto, debido a una ley promulgada en 2008 y que tuvo al año siguiente su primera manifestación pública. La fecha recuerda el día que el monje alemán Martín Lutero clavó sus 95 tesis en la puerta de la Catedral de Wittenberg en 1517. La principal: que la salvación es por fe y no por obras.

Según las estadísticas del INE, las iglesias evangélicas en Chile son la segunda fuerza religiosa. Cerca del 20% de la población se declara adherente a esta corriente del cristianismo. No es una fuerza menor, con una tendencia atomizante y que facilita la creación de grupos que en su forma difieren, pero que en el fondo apuntan a lo mismo: la predicación de Jesús como el único salvador del mundo. Esto, sin mencionar el aporte social, por ejemplo, en las cárceles y con quienes sufren vicios y adicciones.

Por lo mismo, llamó la atención que las marchas realizadas el 31 de octubre pasado pasaran casi inadvertidas. En Santiago marcharon cerca de 200 mil personas que promovían el nombre de Jesús y también principios que pareciera incomodan a muchos, especialmente a quienes nos gobiernan. Es verdad: las iglesias evangélicas están en contra del matrimonio homosexual, el aborto y otras iniciativas que se ponen en contra de lo que, creemos, son los principios de nuestro Dios.

¿Será que la discusión sobre la denominada «agenda valórica» se busca hacer sólo con los que piensan igual? ¿Será que se va a decidir el destino de Chile escuchando únicamente a los que promueven estas políticas? ¿Serán los mismos de siempre los que decidirán sobre todos? ¿O estamos siendo abiertamente discriminados?


Alfred Cooper
Ex capellán de La Moneda

Esteban Márquez
Pastores Unidos de Chile

Francisco Viguera
Sociedad Bíblica Chilena

Juan Carlos Reyes
Organizador de Marcha por Jesús

René Vera
Asamblea de Dios

Hermes Canales
Catedral Evangélica de Peñalolén